Las mascarillas faciales, las de arcilla y las de tela son algunos de mis productos favoritos para la piel. Son fáciles de aplicar, divertidas y tienen resultados maravillosos. Lo que más me gusta de una buena mascarilla facial es que la piel se siente más firme y tonificada después de un solo uso.

¿Qué hacen las mascarillas faciales?

¿Cualquiera puede usar mascarillas faciales? ¡Por supuesto! Tanto hombres como mujeres pueden beneficiarse enormemente del uso de las mascarillas faciales. No son solo un tratamiento de belleza, son la ayuda perfecta el cuidado de la piel.

Las mascarillas faciales se usan comúnmente para:

Otro beneficio de usar mascarillas faciales es la sensación de consentirte como en el spa, pero desde la comodidad de tu casa.

5 razones para aplicarte una mascarilla facial ahora mismo

Incluir una mascarilla facial en tu rutina de cuidado de la piel (y de cuidado personal) puede hacer maravillas. Estos son los principales beneficios de usar mascarillas faciales con regularidad.

1. Los rituales de cuidado de la piel son relajantes y terapéuticos

Las mascarillas faciales no solo brindan resultados que mejoran la apariencia general de la piel, sino que también pueden ser muy terapéuticas. Cuando están impregnadas de aceites esenciales aromáticos como la menta y el romero, las mascarillas faciales pueden levantarte el ánimo al estimular tus sentidos.

Usa las mascarillas faciales como si fueran un lujo. Destina algo de tiempo para ti cuando decidas usar una. Prepara un baño caliente, prende unas velas y deja que la magia de la mascarilla comience a hacer efecto. Te envolverá en una experiencia sensorial fantástica que no solo relajará tu mente y tu espíritu, también dejará un aspecto fabuloso en tu piel.

2. Las mascarillas faciales son útiles para una limpieza profunda

Claro, la limpieza diaria ayuda a retirar la suciedad, la grasa, el maquillaje y las impurezas de la superficie de la piel, pero ¿sabías que una mascarilla adecuada puede mejorar el proceso de limpieza?

Solo una buena mascarilla facial puede ayudar a eliminar las impurezas que se esconden bajo las capas superiores de la epidermis. Algunas personas dicen que usar mascarillas “desintoxica” su piel porque realmente notan una diferencia durante el proceso.

Las mascarillas son muy eficaces para lograr una limpieza profunda, lo que resulta en una mejor apariencia de los poros que se puede ver y sentir. ¿A quién no le gusta eso?

3. Las mascarillas de arcilla ayudan a destapar los poros

Las mascarillas que contengan arcilla bentonita ayudan a limpiar la suciedad y a absorber el exceso de grasa. Además, ayudan a eliminar las células muertas que se acumulan en la piel. Eliminar los residuos de la superficie de la piel contribuye a que se destapen los poros, dándote la apariencia de poros más pequeños y cerrados.

Todos sabemos que los poros tapados solo causan problemas. Sustancias desagradables quedan atrapadas ahí y se desplazan al interior del poro, donde se pueden desarrollar las bacterias. Una vez que estas comienzan a crecer, nuestra piel está en problemas porque pronto aparecerá una mancha, una brote de acné o incluso un grano gigante que nos causará estragos durante días.

Usar mascarillas faciales de manera regular ayuda a mantener limpia la superficie de la piel y a evitar que los poros se tapen. ¡Una excelente razón para usar una mascarilla facial ahora mismo!

4. Las mascarillas faciales ayudan a tener una piel radiante

Las mascarillas, especialmente las que contienen menta en la fórmula, pueden ayudar a estimular la circulación sanguínea. El proceso en el que la mascarilla se seca en tu piel y comienza a endurecerse, y luego, el momento de retirarla, provoca una expansión de los vasos sanguíneos.

Esto asegura una mejora general en el tono de la piel. Tu piel quedará más suave y tersa, y también podrás notar un brillo radiante y una apariencia más fresca. Por eso relájate, siente el cosquilleo, respira el aroma a menta y espera la transformación de tu piel.

5. Las mascarillas faciales complementan tu régimen en general

Las mascarillas ayudan a que el resto de productos para el cuidado de la piel funcionen de manera más eficiente. Si quieres que tus cremas de día, los sueros y los productos de noche se absorban en tu piel de forma más rápida y profunda, entonces la mascarilla facial es básica. Cuando las usas con regularidad, te aseguras de que tus productos tonificantes, hidratantes y protectores funcionen mejor y te permitan obtener los resultados que buscas con mayor rapidez.

Cómo aplicar una mascarilla facial en 5 sencillos pasos

Paso 1: No tiene que ser un lío

Si vas a aplicarte una mascarilla facial mientras estás en la bañera, no tienes por qué preocuparte de hacer un lío. Puedes cubrir tu rostro, cuello y garganta, y relajarte. Si no tienes tiempo para darte un baño, tómate unos segundos para recoger tu cabello y asegurarte de que no quede cerca de tu cara.

Asegúrate de usar ropa que no cubra el área del cuello para que no se manche. La parte desordenada podría ser aplicar la mascarilla, pero una vez puesta, se secará y será fácil de quitar.

Paso 2: Comienza con la cara limpia

Usa tu limpiador diario para retirar toda suciedad, aceite y maquillaje de la superficie antes de aplicarte la mascarilla. Esto asegurará que recibas todos los beneficios para los que fue diseñada.

Consejo profesional: Antes de aplicar la mascarilla facial, coloca una pequeña cantidad de gel o crema para contorno de ojos. Así protegerás esa delicada área de la deshidratación.

Paso 3: Humedece tus manos y aplica la mascarilla directamente sobre la piel húmeda

Recuerda, se llama mascarilla facial por una razón. Debe parecer que usas una máscara cuando te la pongas. Nunca frotes la mascarilla directamente sobre la piel.

Debe aplicarse como el betún de los cupcakes. Recuerda no tocar el área de los ojos, mantener las fosas nasales despejadas y extender la mascarilla por todo tu rostro, cuello y garganta. No hay nada peor que una cara joven y un cuello viejo y arrugado, ¿cierto? Yo siempre trato a mi cuello como una extensión de mi cara.

Paso 4: Déjala puesta y espera

Aprovecha estos diez a veinte minutos para relajarte, arreglar tu cabello, revisar tu correo electrónico… lo que quieras. Solo sé consciente del tiempo y sigue las instrucciones. Los beneficios del producto están vinculados a las instrucciones de uso. Asegúrate de seguirlas para obtener beneficios óptimos.

Paso 5: Hora de retirar la mascarilla

Las mascarillas están diseñadas para adherirse a tu piel, por eso no debes retirarlas de manera brusca. Usa suficiente agua y una toalla para retirar la mascarilla suavemente. Da golpecitos, no frotes tu piel seca con la toalla.

Al hablar de mascarillas, no hay una forma más sencilla de usarlas.

Consejo profesional: Cuando tu mascarilla se seque y sea momento de retirarla, solo coloca una toalla húmeda y tibia sobre el rostro y presiona levemente contra tu piel por unos segundos. Repite un par de veces para ayudar a que la mascarilla se disuelva y se afloje de la piel. Este consejo hará que el proceso de enjuague sea mucho más fácil y suave con tu piel.

¿Con qué frecuencia deberíamos usar las mascarillas faciales?

Cada régimen de cuidado de la piel saludable incluye productos de uso diario y de uso semanal. Puede usar una mascarilla una vez a la semana o hasta tres veces por semana. Dependiendo de tu tipo de piel. Una piel normal a seca debe usarlo menos y una normal a grasa puede usarlo más.

Todo el mundo debería introducir las mascarillas en su régimen de cuidado de la piel, si aún no lo ha hecho. Por unos pocos minutos al día, tu piel experimentará una transformación notable que podrás ver y sentir. Definitivamente te encantará la apariencia de tu piel.

Laura Chacon-Garbato

Laura Chacon-GarbatoDirectora de Capacitación Mundial sobre Productos y Nutrición, Presidenta de la Junta Asesora de Nutrición Externa

Laura es una esteticista licenciada con un posgrado del International Dermal Institute en los EE. UU. Su experiencia se extiende al trabajo con reconocidas empresas mundiales de cuidado personal, donde fue responsable de la estrategia educativa y la ejecución de los objetivos comerciales.